En la actualidad no es de extrañar ver a hombres y a mujeres usando joyas de todo tipo, ya sea caras joyas con metales y piedras preciosas o joyas sin metales preciosos, denominadas bisutería, que tienen también una muy buena acogida debido a sus elaborados diseños que pueden pasar por finas y caras joyas.
Entre los artículos más populares en joyería caben destacar los pendientes, collares, brazaletes anillos, relojes, adornos para el cabello entre muchos otros que van y vienen en función de las modas.
¿Cuál es el origen de las joyas?
El ser humano siempre ha tenido la necesidad de adornarse, podemos encontrar las primeras joyas ya desde la edad de piedra en la que se empleaban materiales, tales como, huesos, piedras, conchas como elementos decorativos a fin de diferenciarse de los demás.
A lo largo de los siglos, las diferentes civilizaciones han dado diversos usos a las joyas, pero no podemos negar que el principal ha sido como símbolo de riqueza para denotar un estatus o pertenencia a un círculo social al que otros no podían acceder .
No obstante, también se ha utilizado para protección en forma de amuletos a fin de protegerse del mal, para un uso funcional como los broches que eran accesorios apara unir o cerrar dos trozos de tejido del vestuario etc.
Principales sociedades que usaban joyas
Como hemos mencionado las joyas se usan prácticamente desde el inicio de los tiempos. No obstante, hubo sociedades donde el uso de las joyas cobraba gran importancia.
Probablemente es la cultura que más haya contribuido a la manufactura de la joyería. Los egipcios eran unos apasionados del oro y las joyas no solo eran llevadas en vida por las clases ricas sino también después de la muerte, formando parte del denominado ajuar funerario.
Para los griegos el uso de la joyas estaba destinado a apariciones públicas u ocasiones especiales y eran principalmente usadas por mujeres para mostrar riqueza estatus, belleza o protegerse del mal de ojo.
Roma
Al igual que los griegos, a menudo el propósito de la joyería Romana era protegerse del mal. Las mujeres solían portar una gran cantidad de joyas, mientras que la mayoría de los hombres usaba un solo anillo.
Como conclusión, decir que prácticamente desde el inicio de los tiempos y en todas las sociedades se ha visto la inclinación del ser humano de adornarse con joyas, con independencia de su género.
Esta moda y tendencia no ha desaparecido con el paso de los siglos sino que ha nacido para quedarse, estando esta industria auge y reinventándose cada día a fin de poder ofrecer los mejores accesorios para impresionar con nuestro outfit.
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